La gastroenteritis eosinofilica es un trastorno inflamatorio en el que los eosinofilos, que son unas células de nuestro sistema inmune, invaden las capas del estómago y del intestino delgado, principalmente el duodeno.
A continuación se ofrece información de interés sobre causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento:
CONCEPTOS Y CAUSAS DE LA gastroenteritis eosinofílica
La gastroenteritis eosinofilica es una enfermedad de origen o etiopatogenia no conocido.
Es un trastorno inflamatorio en el que los eosinófilos, que son unas células de nuestro sistema inmune, invaden las capas del estómago y del intestino delgado, principalmente el duodeno.
El por qué se produce, cómo se ha indicado, es desconocido. Se propone que lo que desencadena este proceso puede tener un componente alérgico, que cuando se pone en contacto con nuestro tubo digestivo activa una cascada inflamatoria, donde los principales protagonistas son los eosinófilos.
Es importante realizar un apunte anatómico, para entender mejor esta enfermedad. El estómago y el intestino delgado tienen distintas capas que son:
La capa mucosa que es la más interior y la que entra en contacto con el bolo alimenticio.
Por encima de ésta está la capa muscular, que dota de movimiento a nuestro tubo digestivo.
Recubriendo a ésta está la capa serosa, que es la más externa del mismo y está en contacto con la cavidad peritoneal abdominal.
Los eosinófilos, por causas que no entendemos completamente en la actualidad, se activan e invaden el estómago y/o el intestino delgado, en una de esas tres capas o en dos o en todas, ocasionando, una respuesta inflamatoria y unos síntomas según la zona que se afecte predominantemente, que serán tratados en otro apartado.
Concepto y causas Gastroenteritis Eosinofílica
Dr. Antonio M. Moreno García
Especialista de la Fundación Española de Aparato Digestivo
Hospital Universitario Puerta del Mar (Cádiz)
SÍNTOMAS DE LA GASTROENTERITIS EOSINOFÍLICA
Los síntomas van a depender, fundamentalmente del área afectada por la infiltración de eosinófilos. Los pacientes pueden presentar dolor abdominal, náuseas, vómitos, saciedad precoz, diarrea, presencia de sangre en heces, pérdida de peso o retraso en el desarrollo estaturoponderal en caso de tratarse de población pediátrica.
Si la afectación llega a la capa muscular del aparato digestivo, pueden también existir síntomas que asemejan una obstrucción intestinal.
Síntomas Gastroenteritis Eosinofílica
Dra. Cristina Carretero Ribón
Especialista de la Fundación Española de Aparato Digestivo
Clínica Universitaria de Navarra
DIAGNÓSTICO DE LA GASTROENTERITIS EOSINOFÍLICA
El diagnóstico de la gastroenteritis eosinofílica se basa en la presencia de eosinófilos en biopsias del estómago o intestinales y/o en el líquido ascítico (así llamamos al líquido que puede acumularse en el abdomen entre las asas intestinales debido a diferentes causas).
Debemos excluir que haya otros órganos afectados y otras posibles causas de eosinófilos en el intestino mediante analíticas completas de sangre y de heces, sobre todo en pacientes que hayan ingerido carne poco cocinada o hayan viajado o residido en países con alta prevalencia de infecciones por parásitos. También debemos preguntar a los pacientes si están tomando medicación sin prescripción médica o suplementos dietéticos o de herboristerías.
Los hallazgos de la endoscopia son inespecíficos, pero el verdadero diagnóstico se obtiene de la biopsia, que demuestra mayor número de eosinófilos en la mucosa del estómago o del intestino de los esperados. No se ha establecido un número de corte concreto por encima del cual podamos decir que sea patológico en todos los casos. El estudio mediante gastroscopia suele ser suficiente en la mayoría de los casos, aunque en presencia de diarrea, también puede ser necesaria una colonoscopia. Es importante destacar que pacientes con afectación de las capas muscular o serosa del estómago o intestino (capas media y externa, respectivamente), pueden tener biopsias de la mucosa (capa más interna) normales. Así, si la sospecha es alta, puede ser necesaria una biopsia de la pared gástrica o intestinal tomada en quirófano por laparoscopia.
Los estudios radiológicos con contraste oral (tránsitos gastrointestinales, tomografía computerizada o resonancia magnética nuclear) pueden objetivar estenosis (o estrecheces) o nodularidad del tubo digestivo. Aunque estos hallazgos no son suficientes para el diagnóstico por sí solos, ya que no son exclusivos de esta enfermedad
Diagnóstico de la Gastroenteritis Eosinofílica
Dra. Susana Jiménez Contreras
Especialista de la Fundación Española de Aparato Digestivo
Hospital Vithas Xanit Internacional, Benalmádena (Málaga)
¿Qué tratamientos existen para la gastroenteritis eosinofílica?
Como hemos visto, la gastroenteritis eosinofílica es una enfermedad que se caracteriza por una inflamación con presencia de un tipo específico de glóbulo blanco: los eosinófilos y que puede afectar al esófago, estómago, intestino delgado y colon.
Hay que decir que el tratamiento de la gastroenteritis eosinofílica está basado en poca evidencia científica al respecto.
Tratamiento dietético:
En personas que presenten síntomas o presencia de malabsorción, puede probarse inicialmente con una dieta de eliminación en la que se prohíben tomar determinados alimentos cuyo potencial alergénico podría influir en el desarrollo de la enfermedad. Algunas de estas dietas son muy estrictas, como la llamada dieta elemental, basada en la toma exclusiva de aminoácidos, que debido al alto coste, mal sabor y el no poder usarse a largo plazo hace que sean poco aceptadas por los pacientes. Otra más utilizada es la dieta de eliminación controlada de seis alimentos: proteínas de leche, soja, trigo, huevos, frutos secos y pescado. Estas dietas tienen que mantenerse al menos 4-6 semanas y si dan resultado, intentar una reintroducción progresiva de los alimentos eliminados. Suelen precisar suplementos vitamínicos y de calcio con vitamina D.
En general el tratamiento dietético suele ser poco aceptado y precisa de una gran motivación por parte del paciente.
Hay que decir que aunque la hipersensibilidad a los alimentos juega un papel importante en esta enfermedad, no hay evidencia del uso de los test de alergias alimentarias para guiar el tratamiento de estos pacientes.
Cuando las medidas dietéticas no consiguen mejorar los síntomas, puede probarse un tratamiento con corticoides buscando la mínima dosis que consiga mejorar los síntomas. Esta mejoría suele ocurrir en las primeras dos semanas de tratamiento, aunque algunos pacientes pueden precisar tratamientos prolongados.
Los pacientes que presentas brotes recurrentes, es decir, períodos en los que se alternan los síntomas con otras fases en las que está controlado, puede ser necesario el uso puntual y repetido de corticoides en esas fases sintomáticas o bien usar dosis muy bajas de mantenimiento.
Otros fármacos:
Se ha descrito el uso de otros fármacos para el control de los síntomas de la gastroenteritis eosinofílica, sin embargo su uso es más limitado, hay poca experiencia comunicada y en algunos casos la eficacia está en entredicho. Así se ha utilizado en algunos casos el cromoglicato sódico, el ketotifeno y el montelukast (medicamentos de uso más habitual en el asma). También se ha ensayado la eficacia de medicamentos basados en anticuerpos humanos, pero como hemos comentado, los datos y la eficacia son limitados.
Tratamiento Gastroenteritis Eosinofílica
Dr. José Miguel Rosales Zábal
Especialista de la Fundación Española de Aparato Digestivo
Hospital Costa del Sol (Marbella)